El presidente polaco, Lech Kaczynski, y algunos de los altos líderes militares y civiles del país murieron este sábado al estrellarse el avión presidencial, debido a una espesa niebla al oeste de Rusia, matando a 97, según informan las autoridades.Los funcionarios rusos y polacos, dijeron que no hubo sobrevivientes en el avión Tupolev que estaba transportando al presidente, a su esposa, y personal para eventos con motivo al 70 aniversario de la masacre de miles de oficiales polacos por la policía secreta soviética en el bosque de Katyn.
El accidente devastó los niveles superiores de las instituciones políticas y militares de Polonia. A bordo se encontraban el jefe de Estado Mayor del Ejército, el comandante jefe de la Armada, y los jefes de las fuerzas aéreas y terrestres.
También perdieron la vida el presidente del banco nacional, vice-ministro de Relaciones Exteriores, capellán del ejército, jefe de la Oficina de Seguridad Nacional, diputado presidente del Parlamento, jefe del comité Olímpico, el comisionado de derechos civiles, y al menos dos asesores presidenciales, y tres legisladores, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Polonia, dijo.
Aunque los signos iniciales apuntaban a un accidente, sin ninguna indicación de juego sucio, la muerte del presidente de Polonia y gran parte del establecimiento del Estado polaco y Ruso en camino a conmemorar uno de los acontecimientos más tristes en la historia de Polonia y su complicada historia con Rusia, hace lucir las cosas como una ironía trágica.
El accidente ocurrió mientras aterrizaban, y mientras que los controladores de tránsito aéreo generalmente tienen la última palabra en si es seguro para un avión aterrizar o no, estos pueden dejárselo a la discreción de los pilotos.
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